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Julio Cortázar en el libro ENTREVISTAS (2025) de Viviana Marcela Iriart: "En mi corazón América Latina existe como una unidad"





DEBEMOS LUCHAR CONTRA EL CHOVINISMO


Su voz grave, de acento particular, atiende el teléfono, sin intermediarios, simplemente él levantando el tubo. Cortázar. Su voz suena seria, como la imagen que tengo de él, una imagen de que siempre tiene 40 años: imposible imaginarle más (y sus biografías dicen que nació en 1914). Explica que quiere ver la revista antes de concedernos una entrevista, y ni él ni nosotras sabemos qué pasó, pero las revistas que dejamos en el hotel jamás llegaron a sus manos. Igualmente sugiere vernos en Parque Central, en la inauguración de la Primera Conferencia Internacional sobre el Exilio y la Solidaridad Latinoamericana en los años 70, en la que él participó. 

Y allí estaba, llamando la atención aún sin quererlo: era el más alto de todos los presentes. Y allí estaba, con la barba y bigotes cobrizos que lleva desde hace tanto, con la seriedad con que aparece en diarios y revistas, con una simpatía que no le imaginaba. Allí estaba, era Cortázar. Un ser humano como usted y como yo, sí, con dos ojos, una boca, dos manos, virtudes, defectos, deseos, nostalgias. 

La entrevista fue en un rincón del Hotel Anauco Hilton, junto con el Asesor de Semana, Jorge Madrazo, el fotógrafo Eduardo Gamondés y cuatro o cinco admiradores y admiradoras del escritor, inmersos disimuladamente –o no- en la conversación. 

Él habló despacio, cálidamente y sus ojos claros recorrían los nuestros mientras sus palabras se abrían en el centro de nuestras mentes, quedando allí mucho tiempo después de haber sido pronunciadas. 

Y él se quedó en nosotras cuando la noche llegó y nos encontró en sitios distintos. Como una presencia invisible, deseada, siempre presente a partir del primer encuentro.



ACERCA DE LA LITERATURA Y LA POLITICA

“Bueno, claro que me molesta ser requerido más para dar opiniones políticas que literarias, porque soy un animal literario. Así como los franceses suelen referirse al hombre como un animal pensante o un animal filosófico, yo soy un animal literario. Nací para la literatura y si fui asumiendo lentamente este compromiso de tipo ideológico que ustedes me conocen, eso fue al término de un proceso muy lento, muy complicado y a veces muy penoso. Porque como mi vocación profunda es la literatura, hay momentos en los que las circunstancias de tipo político –el tener que venir a esta Conferencia, escribir artículos de contenido político, atacar a la Junta chilena o argentina, ocuparme de casos de desaparecidos, muertos, torturados, contestar alguna de la enorme correspondencia que me llega, porque la gente piensa que yo siempre puedo decir algo y ayudar- bueno, hay momentos en lo que, lo confieso porque es verdad, tengo un gran desánimo. Porque me digo: “bueno, ¿alguna vez voy a poder escribir una novela?” Mi ideal sería tener un año o dos de tranquilidad, para escribir una novela que me da vueltas en la cabeza hace mucho tiempo. Por eso es que cada vez más me convierto en un cuentista, porque los cuentos los escribes en el avión, en tu casa, en la calle...”

(....)


©Viviana Marcela Iriart
Caracas, septiembre de 1979.
Publicada en noviembre de 1979
Revista Semana, Caracas 
© Fotografías   Eduardo Gamondés

Fragmento  del libro ENTREVISTAS (2025) de venta en Amazon




De venta en Amazon



Un fragmento de "EL LIBRO DE LA ALEGRÍA" (2024) de Carmen Carmona: cómo sobrevivir al lupus con optimismo

  



"Cuando escribí la Introducción 1 nunca imaginé que, 18 años después, que mis jóvenes hijos me leyeran mi libro los 18 días que estuve hospitalizada al borde de la muerte, sin que los médicos supieran qué era lo que me estaba matando, me iba a resultar de tanta ayuda, me iba a traer tanta paz en medio de la desesperación.

 

18 años atrás yo había publicado El Libro de la Alegría con seudónimo porque pensé que no era compatible con mi trabajo de Presidenta de la Dirección de Cultura del Estado Miranda bajo la gobernación de Enrique Mendoza. Y también porque me daba un poco de pudor, porque yo era conocida como gerente y productora cultural y candidata a Ministra de Cultura.

 

Pero muchas cosas habían pasado en esos 18 años y tener que dejar mi país, Venezuela, fue, sin que lo supiera entonces, el comienzo de mi enfermedad: una se puede enfermar de dolor de patria, morir de nostalgia de patria, agonizar de exilio.

 

Con dos niños pequeños, divorciada, tuve que abandonar mi apartamento que tanto me había costado comprar, mi trabajo que tanto me gustaba, mi ciudad, mi gente, mi familia y partir a países amables pero extranjeros: primero España, después Estados Unidos, donde vivo actualmente.

 

¿Qué me había llevado al hospital? Todas mis articulaciones me dolían como si me estuvieran atravesando cien mil agujas de coser y casi no podía caminar ni respirar. Al día siguiente de ingresar la bolsa de mi corazón se llenó de agua y me dio Pericarditis. Después el pulmón derecho se llenó de agua y se empezó a encoger  como una esponja.  Me intervinieron tres veces y me hicieron tres infiltraciones de pulmón para sacar todo el líquido, una intervención sumamente peligrosa pero que resultó exitosa:  sacaron de 3 a 4 litros de agua.

 

Bajé tanto de peso que al mirarme en los ojos de mis hijos no me reconocía. Los dolores eran insoportables, el simple hecho de mover una mano me producía un dolor tan enorme como si estuviera levantando una tonelada de piedras. Ya no podía caminar y estaba conectada a un respirador porque tampoco podía respirar.

 

Yo pensaba en Pedro y Alejandro, mis amados hijos, no podía dejarlos solos en un país extraño. Ellos, como si alguien los hubiera iluminado, se turnaron

esos 18 días para leerme cada día una historia de El libro de la Alegría. A veces muy consciente, otras casi desvanecida, yo escuchaba sus palabras y sentía una inmensa paz, una fe enorme en que me iba a curar.

 

Pasé 18 días de terror mientras me hacían infinidad de tratamientos y estudios. Pero nada:  los médicos no encontraban un diagnóstico.

 

Me dieron de alta cuando mejoré y por la gracia de Dios conseguí a un médico latino, de esos que una  siente como que lo conoces de toda la vida y a la segunda visita a su consultorio me dijo:  tienes Lupus y si haces un tratamiento te vas a sentir mejor, todo depende de ti.

 

Cuando recibí ese diagnóstico el terror se anidó en todo mi ser porque mi mamá, que era enfermera de las antiguas, siempre me había dicho que el Lupus era un Cáncer.  Lógicamente pensé lo peor y empecé a buscar información en Internet. Y descubrí que  el Lupus, una extraña enfermedad que, sin que la ciencia sepa todavía por qué, mis anticuerpos veían a mi cuerpo como un invasor, un enemigo al que tenían que atacar para salvarme y en ese intento por protegerme me iban matando.

 

Entre tantos escritos que leí sobre la enfermedad uno decía que el Lupus no tiene cura pero si tiene lo que llaman remisión, y que se da más en mujeres latinas, mujeres de color y en  hombres de mas de 30 años.

 

Seguí indagando y leí el reportaje de un psicólogo:  decía que el Lupus se generaba en el cerebro por todas las tristezas, tragedias y traumas acumulados en nuestro corazón.

 

Tristeza. Tragedia. Trauma.

 

Yo sabía mucho de eso. Había perdido a mi madre 20 años atrás, me había divorciado cuando mis dos hijos eran pequeños, había tenido  que renunciar a mi  trabajo que adoraba como Presidenta del Instituto de Cultura  del Estado  Miranda debido a las persecuciones políticas y finalmente tuve que huir de mi país, Venezuela, para iniciar el duro camino del exilio y la diáspora. Fue duro. Muy duro. Hasta llegué a dormir en mi carro con mis dos hijos pequeños porque el dinero no me alcanzaba para pagar un alquiler.

 

Además unos meses antes de enfermarme  perdí a mi amado padre, una pérdida de la que todavía no me repongo porque nunca más pude verlo, ni siquiera asistir a su funeral,  porque estaba exiliada.

 

Duele mucho la perdida de tu país, de tus costumbres, tus sabores, tus olores, tu gente. Tener que dejarlo todo y andar a pasos agigantados en otro país,  sentirte extranjera y no  hablar el idioma.

 

Además había conseguido trabajo en una productora de televisión  y el tren de trabajo era agotador  y el salario malo. El personal no tenía idea de lo que era ensamblar una producción, cosa que me ocasionó mucho estrés, y marcar los errores que se estaban produciendo ocasionó que mis compañeros se volvieran mis enemigos. Fueron momentos difíciles, muy difíciles.

 

Yo sufría en silencio y lloraba a escondidas para que mis hijos no me vieran. Creo que todo eso, sumado también a la muerte de mi querido perro, hizo en mi una gran olla de presión y explotó como un cohete.

 

El dolor en las articulaciones era insoportable y mi estado anímico era de extrema depresión pensando incluso en el suicidio como la vía de escape. Pero gracias  a Dios tengo dos hijos y un nieto maravilloso que me han  ayudado a salir adelante.

 

Empecé el tratamiento y todos los días, como si fuera un rito, leía una página de mi libro. Y entonces sentía que todo eso era pasajero, que le enfermedad no iba a quedarse anclada en mí porque yo no quería, que mis anticuerpos volverían a ser mis amigos, que la tristeza desaparecía.

 

Y así fue.

 

Pasaron cinco años y el Lupus entró en remisión.

 

Entonces me dije: tengo que volver a publicar este libro con mi verdadero nombre y contar mi historia. Porque si yo pude entrar en remisión, casi curarme, de una enfermedad tan terrible, tú también puedes. Y si estás pasando por algo parecido, ojalá que mi libro te sirva de ayuda como me sirvió a mí.

 

Y como dijo el gran escritor argentino Julio Cortázar:

 

“Nada está perdido si tenemos el valor de proclamar que todo está perdido y que hay que empezar de nuevo”.

 

Gracias por leerme. Gracias por existir.

 

Carmen Carmona

Miami, 6 de noviembre de 2024"

 

 

 De venta en AMAZON en papel y e-book

 

 


Un fragmento de HOMENAJE, obra teatral de Armando Africano B, dedicada con mucho humor a Frida Kahlo, Ediciones Choroní (2025)

 



 

 

SALON PRINCIPAL DE UNA GALERIA DE ARTE, DONDE SE EXHIBE UNA EXPOSICIÓN CON OBRAS DE FRIDA KAHLO, SE OBSERVA EN UN LADO EL ESCRITORIO DEL ORGANIZADOR, UNAS SILLAS Y UN ARREGLO FLORAL.

 

ORGANIZADOR:

(REVISANDO VISUALMENTE LA EXPOSICIÓN, ENTRA UN UTILERO CON UNA CAJA QUE COLOCA SOBRE EL ESCRITORIO,  CON GESTOS SE DESPIDEN) Muchas gracias, por favor cierre la puerta, nos vemos mañana (CAMINA UN POCO CONTEMPLANDO EMOCIONADO LA EXPOSICIÓN, SE ACERCA AL ESCRITORIO, PIENSA EN VOZ ALTA MIENTRAS ABRE LA CAJA) Frida estaría feliz si pudiera ver cómo quedó su homenaje, quiero que se parezca a su primera exposición individual, que le organizó su amiga Lola, en 1953 (SACA UN PROGRAMA DE MANO, LO HOJEA Y MUY ORGULLOSO SE SIENTA A LEERLO) “Exposición homenaje a Frida Kahlo”, (PAUSA) ¡Qué buen diseño!, quedó elegante, muy bonito.  (OYE MURMULLOS, SE ALARMA) 

 

ENTRA UNA SEÑORA REZANDO EN VOZ BAJA, MIRANDO A TODOS LADOS COMO BUSCANDO.

 

ORGANIZADOR:

Señora, por favor, ¿Para dónde va? ¿Por dónde entró usted? (SEÑALANDOLE LA SALIDA) vuelva mañana, que estamos en los detalles finales del homenaje, la inauguración es mañana.

 

SEÑORA:

(SERIA, HABLANDO APRESURADAMENTE) Señor, disculpe, (SACANDO DE LA CARTERA UN CARNET) yo soy Secretaria de Actas de SAAFRI la Sociedad de Amigos y Admiradores de la señora Kahlo, además (LE ENSEÑA OTRO CARNET) soy la Presidenta del club de fans de esta maravillosa pintora y santa, y además, (LE ENSEÑA MUY RAPIDAMENTE UNA CARTA) soy, Presidenta de las damas devotas de Santa Frida, y hoy, después de buscarla por todas las iglesias, me enteré que ustedes estaban organizando una exposición en homenaje a mi Santa preferida y como buena devota decidí venir… y entré por la puerta, como entramos y entraremos, todos los admiradores y adoradores de Frida Kahlo, (RAPIDAMENTE ENSEÑA OTRO CARNET) mire mi otro carnet, y quiero aprovechar este momento, porque necesito pedirle algo a nuestra amada, Santa Frida (SACA DE LA CARTERA UN PORTARETRATO Y LE ENSEÑA LA FOTO DE FRIDA) y así en solitario es mucho mejor, (BUSCA UN ROSARIO Y SE ARRODILLA ABRE LOS BRAZOS EN CRUZ HABLÁNDOLE AL PORTARETRATO) ¡Santa Frida bendita!, tú que estás en los cielos, ayuda a esta pobre devota y admiradora tuya, y, (CONFIANZUDA) perdona que te tutee, pero es que yo creo…

 

ORGANIZADOR

(INTERRUMPIENDO) ¿Cómo que Santa Frida? Señora, esto es una galería y precisamente, le estamos organizando un homenaje a Frida Kahlo… (ENFATICO) “la pintora” y usted lo sabe, ¿verdad?  (MIRA A LOS LADOS, BUSCANDO AYUDA)

 

SEÑORA:

(SE ARRODILLA VIOLENTAMENTE, EL ORGANIZADOR TRATA DE LEVANTARLA, ELLA SE VA MOVIENDO ARRODILLADA, EL LA PERSIGUE Y TRATA DE EXPLICARLE, PERO, ELLA LE HABLA TAN RÁPIDO QUE NO LO DEJA RESPONDER) Si, yo lo sé, por eso estoy aquí, y de rodillas ante mi amada Santa Frida, bendita, que por fin la encontré, (MIRANDO ARRIBA CON LOS BRAZOS ABIERTOS Y SEÑALANDO TODO) a partir de ahora, este será tu templo, santísima y amada Santa Frida… (SE LEVANTA Y CAMINA RAPIDAMENTE Y EL ORGANIZADOR SIGUIENDOLA) protégeme a mí y a mi familia de los problemas, de los chismes, de la intriga, de la maldad de mis enemigos y haz que ellos no puedan contra mí. (SUBE LA VOZ) ¡Amada Santa Frida! protégenos con tu, ¿con tuuu? con tus muletas, con tu silla de ruedas, con tu yeso, con lo que quieras, y cúbrenos con tu, con tu, con tu bata sagrada a mis amigos y a mí (GIRA) y a todos nosotros los que vendremos a venerarte, no dejes que nada malo nos suceda. Tú que pasaste tanto trabajo, y superaste todos los sufrimientos y tormentos  (MIRANDO AL ORGANIZADOR SE ARRODILLA Y LO HALA POR LA MANGA) ¡Usted, debería arrodillarse conmigo!, (REGAÑANDOLO) ¡pídale disculpas a nuestra Santa! porque, ya ella debería estar canonizada y con tantos momentos horribles que tuvo que pasar en su corta vida, ni siquiera la nombraron mártir, (SE LEVANTA SE PERSIGNA Y COMIENZA A CAMINAR RAPIDO POR TODA LA GALERÍA REZÁNDOLE EN VOZ BAJA, A TODOS LOS CUADROS Y EL ORGANIZADOR SIGUIENDOLA TRATANDO DE AGARRARLA, SACA UN FRASQUITO CON AGUA QUE ROCÍA POR TODOS LADOS, MIRANDO HACIA ARRIBA Y GIRANDO CON LOS BRAZOS ABIERTOS) ¡Santa Frida bendita!, óyeme mis ruegos te prometo que te visitaré, cada vez que pueda y traeré aquí a mis amigos devotos, mientras te canonizan, también iremos a todos los museos y galerías donde estés expuesta ¿Expuesta? ¡Qué palabra tan fea! Discúlpame, donde te manden, (MOLESTA) ¡qué falta de respeto! ¿dónde te manden? como si fuera una niña…(RECAPACITANDO) donde sean veneradas tus imágenes, y ayúdame a encontrar la solución a este terrible problema que me causa tanta desesperación y me resulta imposible con mi poca fuerza, (GIRANDO LEVANTA LOS BRAZOS Y SUBE LA VOZ) a encontrar soluciones (CAMINA RAPIDO EN GIROS MIRANDO ARRIBA Y MOVIENDO LA CABEZA) ¿Qué hago? ¿Qué puedo hacer? (PARA VIOLENTAMENTE Y PREGUNTA MUY MOLESTA) ¡explícame, dame una señal! Ahora que, por fin te encontré ¿Qué se te ocurre? tú que eres Santa, bueno, todavía no, disculpa me adelanté, pero lo serás muy pronto.

 

ORGANIZADOR:

(BUSCA AYUDA CON LA MIRADA POR TODOS LOS LUGARES) ¡Por Dios, señora! (EN VOZ ALTA) Que alguien me ayude a explicarle a esta señora que necesito que salga (LA TOMA DEL BRAZO Y LA LLEVA HACIA LA PUERTA, ELLA SIGUE REZANDO EN VOZ MUY BAJA Y SALE) señora, por favor, (FINGIENDO SIMPATIA) ¡Adiós señora! venga mañana, (ENSIMISMADO SE ARREGLA EL PALTO Y LA CORBATA) al fin, que tortura de señora (REGRESA AL CENTRO DE LA GALERIA Y ENCUENTRA DE NUEVO A LA SEÑORA) Señora, ¿cómo logró entrar de nuevo? ¿Por qué no se va para alguna iglesia? a lo mejor ahí sí está Santa Frida (RECLAMANDO) ¡Por Dios es como una pesadilla!

 

SEÑORA:

Entré por la otra puerta que está abierta, (ACONSEJANDO) ciérrenla, es peligroso, (EXPLICANDO) y ya fui a las iglesias, visite todas las que conozco y no la encontré (REZA) Santa Frida, Santísima, amada virgen y mártir, tú que sufriste tanto, y que deberías estar en los altares, te pido por mí y todos mis compañeros que sienten lo que yo siento, (MOLESTA RECLAMANDO) Santa Frida, ¡aparécete y cuéntales tú! (EL ORGANIZADOR TRATA DE AGARRARLA) ¡Suélteme!, ¡que yo no estoy loca! y déjeme tranquila, que estoy concentrada y tengo que terminar (SACA DE LA CARTERA, UN CEPILLO Y SE PEINA) de arreglarme para el homenaje a… mi Santa amada

 

ORGANIZADOR:

(LA INTERRUMPE) Por favor, señora un poco de tranquilidad, cállese un momento, la exposición es mañana… (ENTRAN VARIOS UTILEROS CON UNA CAMA Y LA COLOCAN EN EL CENTRO DE LA GALERIA) señora, mire, ya están aquí… ya llegó, arrímese un poco, que ya llegó la cama…

 

SEÑORA:

¿Una cama?

 

 

ORGANIZADOR:

La cama de Frida Kahlo (DIRIGIENDOSE A LOS QUE TRAEN LA CAMA LES INDICA) vamos a colocarla aquí en la mitad, como ella misma pidió en su primera exposición individual, (MIRANDO A LA SEÑORA) y tristemente, la última a la que la señora Kahlo asistió.

 

SEÑORA:

Si yo lo ví en una película por televisión, (DUDANDO) o ¿en un programa de artistas? y me dió mucha vergüenza, mi pobre Santa Frida, bendita, después de ser reconocida en el mundo, era su primera exposición individual que le organizaron en su país, ¡que injusto! (MOLESTA) yo me hago la loca y no voy (LANZA AGUA CON LA BOTELLITA)

 

ORGANIZADOR:

(ORGULLOSO) La señora Frida, a pesar de sentirse muy mal, y que sus médicos se lo prohibieron, decidió asistir a la exposición, llegó en una ambulancia y la trajeron en camilla hasta una cama (SEÑALANDO LA CAMA) como esa.

 

EL ORGANIZADOR BUSCA A LA SEÑORA Y LA VE  DE RODILLAS REZANDOLE A LA CAMA, ELLA TRATA QUE EL, SE ARRODILLE HALANDOLO POR LOS PANTALONES, DISCUTEN EN VOZ BAJA LA SEÑORA SE LEVANTA Y VA HACIA UN CUADRO, EL ORGANIZADOR LA SIGUE, LA SEÑORA ABRE LA CARTERA Y VA SACANDO Y TIRANDO EN EL SUELO, UN MISAL, UN CUADERNO, UNA MANTILLA, VARIAS  VELAS, SE QUEDAN DISTRAIDOS, SIN DARSE CUENTA, DE ENTRE LAS SABANAS, DANZANDO SUAVEMENTE SALE FRIDA  SONRIENDO AL RITMO DE MUSICA SUAVE Y LUCES DE COLORES, SE TOCA, SE ESTIRA, OBSERVA TODO, SONRÍE, LA SEÑORA VOLTEA Y AL RECONOCER A FRIDA SE QUEDA CON LA BOCA ABIERTA MIRANDOLA FIJAMENTE, MIENTRAS EL ORGANIZADOR TERMINA DE  RECOGER Y GUARDAR TODO LO QUE LA SEÑORA SACÓ DE LA CARTERA AL TERMINAR CIERRA LA CARTERA Y LE COLOCA EL BRAZO EN LA ESPALDA DE LA SEÑORA LLEVÁNDOLA A LA PUERTA, TRATA DE COLOCARLE LA CARTERA EN EL BRAZO, SUAVEMENTE LA EMPUJA Y SE DA CUENTA QUE LA SEÑORA ESTA PETRIFICADA, SIGUE LO QUE LA SEÑORA ESTA MIRANDO, ASOMBRADO SE QUEDAN LOS DOS MIRANDO Y OYENDO LO QUE ESTA CONTANDO FRIDA

 

FRIDA:

(SE ACERCA LENTAMENTE) ¡Qué divertido, oyendo mi propia historia…! y él tiene razón, los médicos me prohibieron acudir.


Fragmento de HOMENAJE de Armando Africano B. (2025), diseño, portada y contraportada de Jairo Carthy, Ediciones Choroní.  

Obra completa de venta en Amazon, en papel y e-book.

 

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SONIA ZILZER en el libro ENTREVISTAS (2025) de Viviana Marcela Iriart : “La memoria es el camino a la identidad”



 

Sonia Zilzer, socióloga caraqueña graduada en la UCAB, fue la Coordinadora del tercer volumen del libro Exilio a la Vida  publicado en 2011. Gerente de Cultura de la  Unión Israelita de Caracas, institución que editó los tres libros, trabajó varios años en Ginebra en el CIM (Comité Intergubernamental para las Migraciones, hoy  OIM).


¿Qué es Exilio a la Vida?

Es un proyecto de memoria histórica para resguardar el  testimonio de sobrevivientes de la Shoa que viven en Venezuela, que se concretó en la publicación de tres libros. Este proyecto surgió  en el año 2004 aproximadamente, en la Comisión de Cultura de la Unión Israelita de Caracas, dirigida entonces por Dita Cohén, Marianne Beker  y Rebeca Lustgarten, quienes  estaban  desarrollando el proyecto de  historia oral, donde  se grabaron en video más de 300 entrevistas a fundadores y activistas de la comunidad judía de Venezuela. Con esa información, la recolección de documentos y fotografías se produjo el documental Valió la Pena, dirigido por Henry Grunberg, con  guión de Néstor Garrido y Lilian Rotter, que cuenta el surgimiento de la comunidad askenazí en el país.

Los entrevistadores del proyecto también habían participado en el proyecto de la Shoah Visual History Foundation, creado por Steven Spilberg  después de la filmación de La Lista de Schindler, que consistía en recolectar en video los testimonios de los sobrevivientes de la Shoah alrededor del mundo. 

¿Cuántas entrevistas  realizó la Shoah Fundation en Venezuela?

Alrededor de 300.  Y partiendo de esos testimonios se  decidió realizar el libro. Se pidió autorización a la Fundación, se transcribieron y luego Jacqueline Goldberg, escritora altamente reconocida, los editó y convirtió en relatos.

(...)

Fragmento. 

Entrevista completa en el libro ENTREVISTAS (2025)

Caracas, Agosto 2012






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Excelentísima Belén de Ojeda DE LO QUE GOYA SE ENTERÓ

 



Belén Ojeda -  Foto: Internet



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Texto, Carta

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Del libro de Belén Ojeda “Grafitti y otros textos”, Monte Ávila Editores, 2002

 

 



                      

                         DE LO QUE GOYA SE ENTERÓ

 


Excelentísima Doña Belén de Ojeda:


Mucho ha de empacarse Vuestra Merced por el atrevimiento de estas letras, que con muchos trabajos y placer os confiero, tanto más que para vos soy un extraño.


He permanecido hasta ahora en el más reposado de mis silencios, dejando que de mí se diga cuanto se quiera y mucho más, sin que aqueso logre perturbarme. Sin embargo, esta mañana ha traído el mozo, junto con los aceites y los tintes, un ejemplar de vuestro libro y he leído con la mayor sorpresa un fragmento del Diario de Cayetana. Os confieso que desconocía por entero que ella llevara alguno. Del ejemplar que me interesa saber, ha publicado V.M. egoístamente tan sólo un trozo y cierto pálpito me hace estar cierto, que habiendo llegado ese escrito a una mujer, para más señas sabida de letras como sois, que jamás conoceré el resto. Conozco ya vuestra solidaridad de género, tras de la que ocultáis los más sorprendentes secretos. A cada instante me pregunto por las frases que habrá estampado mi Cayetana de su dulce mano, las huellas de las horas vividas en sus ojos y en mis manos, cuando le daba entonces vida eterna. De esas tintas penden también retazos de mi existencia.


No temo que a partir de ahora, de mí se sepa más de lo que se sabe u otra cosa, pues que al fin ya nada puede afectarme. Más bien, entended que estas escritas se resuelven en el intento de convencerle, de rogarle hacerme llegar copias de esas páginas que tiene en su poder, y ofrezco por ello la mayor discreción. Por mis señas no debéis preocuparos, aquí me hallo de cierta forma conjurado por vos y seguramente vuestras misivas lleguen, aunque tal poema no haya sido escrito pensando precisamente en mí.


Sabed que estoy, por otra, muy interesado en un retrato vuestro, y por Dios que no he podido siquiera comenzar un tenue boceto, gracias a que vuestro exceso de actividad no os hace estar un momento quieta. Os aseguro que haré de vos un retrato que levantará escándalo. Libraos, pues, en mis manos y dejadme hacer del arte que tan bien conozco. Antonio opina que debería plasmaros engalanada con riqueza, rodeada de verdor exuberante dibujado a todo detalle y cercada de musas, pero soy poco amante de ese regusto regalón por las alegorías y las cornucopias. Prefiero retrataros tal cual sois, natural, clara y sencilla, despojada de espejuelos y de ropas, con vuestra figura despachada, recostada en la tumbona y con la mirada de soslayo al frente, mirándome.


¿Os reís?


Demostrad que vuestra osadía va más allá de la muestra de esa página de diario, que sois de la misma savia de aquélla a quien nombráis y dejad de lado toda negativa a bocajarro que oculte un falso recato. Sabed que antes que hombre soy un artista y que la condición de la que gozo ahora, me ha donado el perfecto dominio de mi técnica, visto que no me atan ya las fuerzas de la carne...


No debéis tampoco temer el origen y el misterio de estas líneas. Nada peor que los farsantes de ferias de esotería y aguafiestas de oficio que desearan convenceros que intento hechizaros para que vengáis a mis cármenes. Nada menos cierto. Puedo estar en muchas plazas a un tiempo, en dondequiera y como quiera ¿o pensáis que estar en tantos libros a la vez es un don de la casualidad?


Decidíos. Llevo todas las horas del mundo, y como mal puede el tiempo medirse a sí mismo, muy poco me pesa el esperar. Todo está dispuesto a la menor seña vuestra, hacedme avisar y haré de S.E. la más inmortal entre todas las músicas.


 

A besamanos, siempre Vuestro,


                                                                De Goya y Lucientes

 

 

 

                                                                       *

 

 

 

 

 

ACLARATORIA

 

    Ante todo, deseo aclarar que de la publicación de éste y otros textos por difundir, ha sido especial y principal promotora Viviana Marcela Iriart, pujante, tenaz escritora y amiga de larga data, a quien le debo impulso y líneas. Su especial estímulo y empuje, han hecho posible que salgan del baúl algunos escritos olvidados; agradeceré siempre sus observaciones, opiniones y gran generosidad. Para mí es un honor me haya colocado en el grupo de otras escritoras y producciones literarias probablemente más meritorias. Gracias.

 

En segundo punto, paso a exponer que del poemario “Grafitti y otros textos”, original de Belén Ojeda -que leí en su momento y hoy quizá sea objeto de edición incunable, quién sabe, de tan singular músico y poetisa venezolana-, captaron mi atención tres textos, altamente atractivos para mí por su potencial teatral y lúdico.

 

En primer lugar, el “Veredicto”; enunciado al inicio del libro, ha dado pie a una pequeña escena de Teatro del Absurdo, así como las alusiones a Goya (“Del Diario de la Maja”) y a Velásquez, han decantado una, a una comunicación epistolar y otra, a un par de textos disquisitorios sobre los que me resultó entonces muy nutritivo investigar y reflexionar.

 

De esa ocasión y a modo de chanza literaria, paso en consecuencia a compartirles una pretendida “carta”, dirigida a Belén Ojeda, de parte del genial pintor español.

 

                         Fanny Arjona

 

 

                                                                   ***

 

 

BELÉN OJEDAnacida en Caracas, Venezuela. Traductora, poeta, músico profesional y docente de clases de Lenguaje y Análisis Musical. Egresada del Conservatorio Tchaikovsky de Moscú. A los 8 empezó estudios Teoría y Solfeo y luego piano. Ganó una beca para proseguir estudios musicales en Conservatorio Chaikovski de Moscú donde vivió ocho años, lo que le acercó a la lengua rusa y a su poesía. Se graduó en Dirección Coral. Ha sido directora coral y coralista. La música y la literatura siempre han estado presentes en su vida. A su vuelta a Venezuela formó parte del Taller de Poesía del CELARG, coordinado por Ida Gramcko.

Ha publicado los poemarios: Días de solsticio (PEN CLUB, 1995); En el ojo de la cabra (Editorial Diosa Blanca); Territorios (La Liebre Libre Editores, 2000); Graffiti y otros textos (Monte Ávila Editores Latinoamericana, 2002) y Obra completa (LP5 Editora, 2020). Traductora directamente del ruso de: Anna Ajmátova, Marina Tsvietáieva, Ossip Mandelshtam y Boris Pasternak.

 

                                                                   ***


FANNY ARJONA

 

Cantante lírico, actriz y escritora venezolana. En 2009  ganó el Concurso Internacional de Canto Lírico Ciudad de Cervinara en Avellino, Italia.  Su actuación en dicho Festival, le valió la invitación –como única latinoamericana participante en el evento- a audiciones de convocatoria exclusiva para cantantes de la Unión Europea en el Teatro del Giglio, en Lucca. Es también la primera venezolana que ha logrado ser admitida en un reducido número de participantes en las Master Class de la reconocida soprano búlgara Rayna Kabayvanska.

Ha cantado en calidad de solista con la Orquesta Sinfónica Juvenil Simón Bolívar, Orquesta Sinfónica de Venezuela, Orquesta Municipal de Caracas, Gran Mariscal de Ayacucho y Orquesta Sinfónica de la Ópera, bajo la conducción de los Mtos. Alfredo Rugeles, Juan Carlos Núñez, Rodolfo Saglimbeni, Antonio Delgado y Ángelo Pagliuca.  Formó parte activa del staff de la Compañía de Ópera Memoria de Apariencias de la Camerata de Caracas, bajo la dirección de Isabel Palacios.

Como actriz formó parte del importantísimo grupo Rajatabla de Carlos Giménez, siendo dirigida por él en numerosas obras con las cuales recorrió gran parte del mundo, destacándose La Muerte de García Lorca  y  Bolívar de José Antonio Rial,  La vida es sueño de Calderón de la Barca y el musical  Historia de un Caballo de León Tolstoi.

Como escritora es autora del libreto Los Albores de la Revolución, espectáculo multidisciplinario para actores, cantantes, Coro y Orquesta del Mto. Juan Carlos Núñez, concebido para exaltar la gesta independentista de Francisco de Miranda y del libreto de la  obra sinfónica Amazonía del Mto. Núñez. También hizo una versión de “La Orestíada” de Esquilo –para la Cátedra Latinoamericana de Composición Antonio Estévez- y la del libreto original de “La Viuda Alegre” de Léhar.

Actualmente asume la autoría del libreto “Gringo enamorado”, junto al artista plástico José Augusto Paradisi.

 

FANNY ARJONABlog / X /  Instagram

 




 

 

 

"A punto de despegar", un capítulo del libro "COMO SOPORTAR LA VIDA CON HUMOR", confidencias de un actor de, Jairo Carthy C, Ed. Choroní 2025

 






"A PUNTO DE DESPEGAR…

 

Durante el rodaje de la primera película en la cual tuve el placer de participar, me sucedió un episodio muy pero, muy inverosímil, pero les aseguro que es verdad.

 

Estábamos filmando en las afueras de la ciudad de Maracaibo, era un miércoles y en Caracas me estaba presentando en una obra de teatro y esa era la semana final de la temporada.  En las cláusulas de mi contrato decía que yo podía filmar hasta el mediodía de ese día, pues debía volar a Caracas para hacer la función de esa noche, y que, a partir del siguiente lunes podían disponer de mi tiempo como mejor les convenía, pues ya no tenía funciones de teatro. 

 

Hasta ahí todo iba muy bien. El detalle estaba en que eran casi las 3 de la tarde, el último vuelo a Caracas salía a las 4 y estábamos en las afueras de la capital. Y para completar, la escena que estábamos filmando era nada más y nada menos que la de la muerte de mi personaje, un terrible asesino a sueldo, al que para beneplácito de la audiencia de los cines matarían con muchos tiros y correría mucha sangre.  Bueno en realidad la sangre corrió durante toda la película,  pues mataban a todo el elenco, no en balde se llamaba “La Matanza de Santa Bárbara”.

 

Pues bien, un maquillador español de efectos especiales tuvo a su cargo mi aspecto terrible, entre todas las cosas que me hizo, cuidadosamente introdujo dentro de mi cuero cabelludo un producto parecido a un gel, era más como un chicle negro el cual se derretiría con el calor y daría un aspecto de sangre muy natural que correría por mis sienes, mis ojos, mi cuello etc. etc.  Por fin filmamos la escena, ya estaban los asistentes con toallas, agua, y mi ropa dispuestos a quitar y limpiar cualquier vestigio de mi personaje.  Pues bien,  allí en medio de la calle y con la rapidez que era capaz, me desmaquille y me monte en el taxi rumbo al aeropuerto “La Chinita” a tomar mi vuelo de regreso a Caracas.

 

Íbamos a más de 120 km. por esos caminos, parecía que nunca llegaríamos, parecía la Cenicienta camino a su casa apurada de llegar antes de que den las 12 y se acaba el encanto.

 

Al fin llegamos, salgo corriendo del taxi y me dirijo al mostrador de la línea aérea, allí me encuentro con un empleado que me mira aterrado y me informa que el vuelo está a punto de despegar. 

 

Yo me preguntaba: ¿y a este tipo qué le pasa? Me quería morir, ¡yo debía tomar ese vuelo como sea! Le pregunto que por dónde se va a la pista y me señala unas rampas.  Yo parecía un patinador de hielo,  iba por esas rampas volando y ya al final me encuentro con unos guardias nacionales, obviamente me detienen, me miran aterrados y yo les digo:

- Disculpen, pero tengo que tomar ese vuelo, es de vida o muerte…. 

El guardia ve a su compañero, este asiente y por una radio se comunica con la torre de control para que detengan el avión.  De nuevo ambos me miraban casi con lástima.  Yo pensaba: aquí todos están locos.  Me dice el funcionario:  ¡Corra! ¡Corra que el avión lo está esperando! 

 

No sé si ustedes saben que esos aviones pequeños tienen una salida o entrada por detrás, sí como por el culito del avión, pues mientras corría veo que se va abriendo una compuerta, pero no baja ninguna escalera, cuando llego y veo hacia arriba la aeromoza aterrada me dice:

- Suba, suba… y yo me preguntaba: ¿Y por dónde pendeja? Por fin bajo la escalera como de 2 peldaños, y quedaba muy arriba. Cual primate me trepé por las escaleras y subí me senté en un puesto cualquiera y la aeromoza me dijo:  no se mueva que vamos a despegar.  Por supuesto las miradas de TODOS los pasajeros caían sobre mí y yo pensaba, ¿pero por qué me miran aterrados?  Por fin el avión despegó y la aeromoza muy amable me dice:

- ¿Quiere algo, un calmante? … se ve muy mal, y yo le respondo:

- Bueno agua o algo de tomar si es tan amable.

 

Me asignan mi puesto y el tipo que está sentado a mi lado mete casi un grito y me dice:

- ¡Señor que le pasó, por Dios!!!

Yo no entendía nada. Pero cuando me voy a limpiar el sudor de mi cara, lo que me limpio es “sangre”.  El famoso producto hizo su efecto y por supuesto no me habían quitado todo el que me habían puesto en el cuero cabelludo y entonces hizo su función.  Yo sangraba de manera muy natural

 

Lo increíble de esta historia y que siempre me he preguntado, es ¿cómo dejaron subir así a un avión a una persona que supuestamente estaba herida? Y nunca me preguntaron ni mi nombre, ni me pidieron el boleto… nada.  Lo importante es que pude llegar a tiempo a hacer mi función… ¡Ah! Y esa escena que tanto trabajo dio no sirvió.  La repetimos unas semanas después en Calabozo y con toda la calma y tranquilidad disfruté de la muerte de mi personaje.

 

Por cierto, el muchacho que viajó a mi lado… sí, el del grito, era nada más y nada menos que Amílcar Boscán solista del conocido grupo “Guaco”."



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