la rebelión consiste en mirar una rosa

hasta pulverizarse los ojos


Alejandra Pizarnik


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Oriana Fallaci: "Nuestro primer enemigo .. es el Corán...." / entrevista de Andrzej Majewsk



‘Nuestro primer enemigo no es Bin Laden ni Al Zarqaui, 
es el Corán, el libro que los ha intoxicado’


Polémica y beligerante, desgarradora y sincera, la periodista italiana Oriana Fallaci aprovecha sus ensayos y artículos para manifestar su honda preocupación por la amplia presencia en Europa de fieles musulmanes. En esta entrevista, realizada por un sacerdote católico que trabaja además en la televisión pública polaca, Fallaci insiste en la idea de que el Despertar del Islam es el fin de Occidente.



Pregunta.- Los responsables de los atentados terroristas de Londres eran musulmanes nacidos en Gran Bretaña o ciudadanos ingleses. Por lo tanto, se podrían considerar ciudadanos europeos. ¿Cree que para defender nuestro continente y la civilización europea tenemos que expulsar a todos los musulmanes de Europa?

Respuesta.- Para comenzar, no son del todo europeos. No pueden considerarse europeos. O no más de lo que nosotros podríamos ser considerados islámicos, si viviésemos en Marruecos, en Arabia Saudí o en Pakistán, con el oportuno permiso de residencia o con la ciudadanía. Porque esta última no tiene nada que ver con la nacionalidad.

A mi juicio, incluso los que tienen la ciudadanía son huéspedes y nada más. O mejor dicho: invasores privilegiados. Además, una cosa es expulsar a los aprendices de terroristas o a los aspirantes a terroristas, a los ilegales, a los vagabundos que viven robando y trapicheando con droga o, incluso, a los imanes que predican la guerra santa e incitan a sus fieles a masacrarnos, y otra cosa es expulsar indiscriminadamente a toda una comunidad religiosa.
Naturalmente, si quisiesen irse por su propio pie, no lloraría. Más aún, le pondría una vela a la Madonna. De hecho, ya lo sugería en el ensayo publicado recientemente en el Corriere della Sera, titulado El enemigo que tratamos como amigo.:"¿Si somos tan estúpidos, tan tontos, tan despreciables y pecaminosos -escribía-, si nos odiáis y nos despreciáis tanto, ¿por qué no os volvéis a vuestra casa?"

Pero deben estar bien aquí, porque no quieren irse. Ni siquiera lo piensan. Y aunque lo pensasen, ¿cómo llevarían a la práctica algo así? ¿Por medio de un éxodo parecido al de Moisés guiando a los judíos fuera de Egipto a través del Mar Rojo? Ya son demasiados.

Calculando sólo los que están en la Unión Europea, cerca de 25 millones, según los datos más recientes, calculando también los que están en los países que no forman parte de la Unión y en la ex Unión Soviética, cerca de 60 millones. Esta es su Tierra Prometida, ¿o no? Respeto, tolerancia. Asistencia pública, libertad en abundancia. Sindicatos y jamón, el despreciado jamón, vino y cerveza, el despreciado vino y la despreciada cerveza. Vaqueros y licencia para ejercer su prepotencia por doquier sin ser castigados ni recriminados ni llamados al orden (incluida la licencia de tirar los crucifijos por las ventanas). Protectores o colaboracionistas siempre dispuestos a defenderlos en los periódicos y a impedir su expulsión, aunque venga dictada por los tribunales. Querido padre Andrzej, es demasiado tarde ya para pedirles que vuelvan a su casa. Habríamos tenido, habrían tenido que pedírselo hace 20 años. Pero en cambio, los hemos dejado entrar, en nombre de la piedad y del pluriculturalismo, de la civilización y del modernismo, aunque en realidad gracias a cínicos acuerdos euro-árabes de los que hablo en mi libro La fuerza de la razón, peor aún; tras haber descubierto que no les gustaba ya hacer de proletarios, recoger los tomates, trabajar en las fábricas, limpiar nuestras casas y nuestros zapatos, les llamamos. ‘Venid, queridos, venid, porque tenemos tanta necesidad de vosotros…’, y ellos vinieron. A cientos, a miles.

Y qué le vamos hacer si, muchas veces, en vez de personas deseosas de labrarse una vida digna trabajando, nos encontramos a menudo con vagabundos. Vendedores ambulantes de inutilidades, dispensadores de droga y futuros terroristas. O terroristas ya entrenados y entrenándose. ¡Y qué le vamos a hacer si desde el momento en que desembarcan nos cuestan un riñón! Comida y alojamiento. Escuelas y hospitales. Subsidios mensuales. Y qué le vamos hacer si nos llenan de mezquitas. Y qué le vamos a hacer si se adueñan de barrios enteros e, incluso, de ciudades enteras. Y qué le vamos a hacer si, en vez de mostrar un poco de gratitud y un poco de lealtad, pretenden incluso el derecho al voto que, pasándose la Constitución por el forro, le regalan los partidos de izquierdas. Y qué le vamos a hacer, si para proteger la libertad, por culpa suya tenemos que renunciar a algunas libertades. Y qué le vamos a hacer, si Europa se está convirtiendo o se ha convertido ya en Eurabia.

Querido padre Andrzej, no sé qué es lo que está pasando en Polonia. Pero en el resto de Europa, comenzando por mi país, no está sucediendo lo que pasó en Viena hace tres siglos. Cuando los 600.000 otomanos de Kara Mustafa pusieron sitio a la capital, considerada el último baluarte del cristianismo, y junto a los demás europeos (excepto Francia) el polaco Juan Sobieski los expulsó al grito de «Soldados, combatid por la Virgen de Czestochowa». No, no. Aquí está pasando lo que pasó, hace más de 3.000 años, en Troya, cuando los troyanos abrieron las puertas de la ciudad y condujeron dentro el caballo de Ulises. Despreciada como una Casandra a la que nadie escucha, hace años que repito sin cesar la misma canción: ‘Arde Troya, arde Troya’. Y hoy, todas nuestras ciudades y pueblos arden de verdad. ¿Exiliar? ¿A quién quiere exiliar? Hoy, los exiliados somos nosotros. Exiliados en nuestra propia casa.





P.- ¿Cómo cree que debería reaccionar el papa Benedicto XVI ante esta situación, siendo, como es, el jefe de la Iglesia Católica Apostólica Romana y líder de una religión que predica paz, no violencia y bondad?

R.- Mire, en mi ensayo El enemigo que tratamos como amigo, en un momento determinado me dirijo directamente a Ratzinger reprochándole lo que le reprochaba a Wojtyla. El diálogo con el Islam. ‘Santidad -le digo-, ¿cree realmente que los musulmanes aceptan dialogar con los cristianos, incluso con las demás religiones o con los ateos como yo? ¿Cree realmente que pueden cambiar, revisarse y dejar de sembrar bombas?’. Y ahora añado: El terrorismo islámico no es un fenómeno aislado, un hecho en sí mismo. No es una iniquidad que se limita a una minoría exigua del Islam. (En cualquier caso, una minoría nada exigua. Se calcula que, en Europa, dispone de 40.000 terroristas dispuestos a sacrificarse. Y no olvidemos que detrás de cada terrorista hay una organización concreta, una excelente red de contactos, un océano de dinero. Ergo, ese número de 40.000 hay que multiplicarlo al menos por cinco o por 10).




La ofensiva global ideada por Jomeini


Entrevistando a Jomeini




El terrorismo islámico -prosigue Fallaci- es sólo un rostro, un aspecto de la estrategia adoptada en tiempos de Jomeini (en los días de los cínicos acuerdos euro árabes) para poner en marcha la ofensiva global llamada el Despertar del Islam. Un despertar que, una vez más, pretende acabar con Occidente, su cultura, sus principios y sus valores. Su libertad y su democracia. Su cristianismo y su laicismo. (Sí, señores, también con el laicismo. Quizás sobre todo con el laicismo. ¿Todavía no se han dado cuenta de que el laicismo no puede cohabitar con la teocracia?).

Un despertar, en definitiva, que no se manifiesta sólo por medio de las matanzas, sino también por medio del secular expansionismo del Islam. Un expansionismo que, hasta el asedio de Viena, se producía con los ejércitos y las flotas de los sultanes, los caballos, los camellos y las naves de los piratas, pero que ahora se realiza por medio de los inmigrantes, decididos a imponernos su religión. Su prepotencia, su enorme capacidad prolífica.
Pues bien, el Papa lo sabe mejor que yo. Mejor que todos nosotros. El problema es que se encuentra en una situación dificilísima desde un punto de vista político y humano. Ante todo, por el hecho de estar al frente de una Iglesia que basa su credo en el amor y en el perdón. Una Iglesia que, en términos ecuménicos, predica el ‘ama a tu prójimo, por lo tanto también a tu enemigo como a ti mismo’.

Después, por el hecho de gobernar una inmensa comunidad que, respecto al Islam, incluso en las filas de su jerarquía, está dividida, es decir, enrocada sobre posiciones opuestas. Piense en Caritas que rescata a los ilegales e, incluso, los esconde. Piense en los Combonianos que con la bandera arcoiris sobre la sotana blanca les distribuyen simbólicos permisos de residencia. Piense en los sacerdotes que, en los altares de sus iglesias, permiten a los imanes celebrar el matrimonio mixto y gritar Alá akbar, Alá akbar, (como pasó, por ejemplo, en Turín).

Y por último, al Papa le pesa el hecho de ser el inmediato sucesor de otro Papa, el papa Wojtyla, que fue el primero en hablar de diálogo. Que con el comunismo y con la Unión Soviética utilizaba el puño de hierro, pero con el Islam utilizaba el guante de terciopelo. Que invitaba a los imanes a Asís. Que recibía en el Vaticano al ex terrorista y magnate de terroristas, Yasir Arafat. Y que nunca condenó directamente a Bin Laden.

Pues bien, Ratzinger quería mucho a Wojtyla. ¿Cómo se puede pretender, ahora, que, una vez vestido de blanco, emprenda otro camino y rechace el sueño del diálogo? Y sin embargo, confío en Ratzinger, en Benedicto XVI. Es demasiado inteligente para no darse cuenta de que el Despertar del Islam está en marcha como en la época del Imperio Otomano, y que con su fundamentalismo ha asumido los contornos de un nuevo nazismo. Que dialogar o ilusionarse con poder dialogar con un nuevo nazismo equivale a cometer el mismo error que la Inglaterra de Chamberlain y la Francia de Daladier cometieron en 1938. Cuando, creyendo poder dialogar con Hitler, Francia e Inglaterra firmaron el Pacto de Munich y, un año después, se encontraron con Polonia invadida por los nazis.

Es un hombre realmente razonable, Benedicto XVI. Mire cómo afronta, por ejemplo, el irresoluble problema de conciliar la fe con la razón. Se da perfectamente cuenta de que el laicismo ha perdido el tren en su relación con el Islam. Han creado un vacío que alguien tiene que llenar. Por eso creo que, antes o después, él lo llenará. Eso significa recordar a la intransigencia de la fe que la autodefensa es legítima defensa. No un pecado. Significa sostener que, cuando es necesario, incluso un santo puede dar un puñetazo en la mesa. Comportarse como Jesucristo que pierde la paciencia en el Templo y tira los puestos de los mercaderes y quizás les lanza también un puñetazo a la nariz. Y a mi juicio, significa elegir bien a los aliados. Para mí, atea-cristiana (devota no, pero cristiana sí), el cristianismo no es sólo una filosofía de primera calidad, un pensamiento en el que inspirarme, una raíz de la que no puedo, no debo y no quiero prescindir. Es también un aliado. Un compañero de ruta. Por lo tanto, también lo es el que lo interpreta a su máximo nivel. El que lo representa.



P.- ¿Qué opina de la guerra contra el terrorismo, capitaneada en estos momentos por EEUU?

R.- Mire, padre Andrzej. Un mes antes de que estallase la guerra en Irak escribí para el Wall Street Journal y para el Corriere della Sera un artículo titulado La Rabia, el Orgullo y la Duda donde decía: ‘¿Y si Irak se convirtiese en un segundo Vietnam? ¿Y si de la derrota de Sadam Husein naciese una República Islámica de Irak, es decir, una copia de la República Islámica del Irán jomeinista? La libertad y la democracia no se pueden regalar como dos trozos de chocolate. Especialmente, en un país y en una sociedad, que ignora el significado de esos conceptos. La libertad hay que conquistarla. Quizás me equivoque, pero yo dejaría a los iraquíes cocerse en su propia salsa’.





No sabe qué es la democracia



Entrevistando a Kadafi

 

¿Me equivocaba? -se pregunta la veterana periodista-. Me temo que no. Es verdad que me encanta ver a Sadam Husein caído de su trono junto a su banda. Me satisface pensar, aunque sólo sea con una migaja de esperanza, que aunque ignoren lo que es la democracia muchos iraquíes fueron a votar. Pero, visto el precio que están pagando y que estamos pagando, vistos los muertos que a ambos nos cuesta, sigo pensando que habría sido mejor dejarlos cocer en su propia salsa. En Irak, Estados Unidos se ha empantanado, como se empantanó en Vietnam.

Y por si eso no fuese suficiente, el Irán de Jomeini se ha quitado la máscara, imponiendo sus centrales nucleares y eligiendo como presidente al torvo individuo que en Teherán dirigió el secuestro de los americanos de la embajada de EEUU. El petróleo aporta mucho dinero, y, con la ayuda de Irán, la República de Irak se torna un fardo cada vez más pesado.

Dicho esto, es decir admitiendo que ya se ha metido la pata, afirmo que atribuir el terrorismo a la guerra de Irak es un error e, incluso, un fraude para engañar a los tontos. El 11 de Septiembre no había estallado la guerra de Irak. La guerra que declaró oficialmente el 11 de Septiembre Osama bin Laden ya estaba en marcha. Desde hace décadas, los hijos de Alá venían atormentando a Europa, a Norteamérica y a Israel con sus matanzas. ¿Recuerda las que, también en Italia, sufrimos a manos de Habash y de Arafat?

Entiendo hacia dónde apunta su pregunta. Apunta al asunto de la retirada de tropas de Irak. Y le contesto: El terrorismo no cesará ni disminuirá imitando al irresponsable e insoportable Zapatero. Al contrario. Cada vez que un contingente se retira, Europa ofrece otra prueba de debilidad y de miedo.


En Vietnam


P.- A su juicio, definir al Islam como «una religión de paz» y decir que el Corán enseña la misericordia es una tontería. ¿Por qué?

R.- Porque, amén de 14 siglos de Historia (siglos durante los cuales el Islam no hizo otra cosa que desencadenar guerras, es decir conquistar, someter y masacrar), lo dice el Corán. Es el Corán, y no mi tía, el que llama a los no musulmanes «perros infieles». Es el Corán, no mi tía, el que los acusa de oler como los simios y los camellos. Es el Corán, no mi tía, el que invita a sus secuaces a eliminarlos. A mutilarlos, a lapidarlos, a decapitarlos o, al menos, a degollarlos. De tal forma que, si en Arabia Saudí, te pillan con una cruz en el cuello, una estampita en la cartera o una Biblia en tu casa, terminas en la cárcel y quizás en el cementerio.







Hay que meterse en la cabeza esta sencilla, inequívoca e indiscutible verdad: todo lo que los musulmanes hacen contra nosotros y contra sí mismos está escrito en el Corán. Viene pedido y exigido por el Corán. La yihad o guerra santa. La violencia, el rechazo de la democracia y de la libertad. La alucinante servidumbre de la mujer. El culto a la muerte, el desprecio a la vida… Y no me responda como los zorros del Islam moderado, no me diga que en el Corán hay versiones distintas y diversas. Por mucho que cambien las versiones, en todas ellas la esencia es la misma. No entiendo la deferencia con la que ustedes, los católicos, se refieren al Corán. Alá no tiene nada que ver con el Dios del cristianismo. Nada. No es un Dios bueno, no es un Dios padre. Es un Dios malo. Un Dios dueño. No trata a los seres humanos como hijos. Los trata como súbditos, como esclavos. Y no enseña a amar: enseña a odiar. No enseña a respetar: enseña a despreciar. No enseña a ser libres: enseña a obedecer.


El enemigo al que tratamos como amigo

Con el presidente de Irán, 1979


Basta leer las suras sobre los «perros infieles» -apunta la periodista- para darse cuenta de ello. No, no. Nuestro primer enemigo no es Bin Laden. No es Al Zarqaui. No son los terroristas que cortan cabezas. Nuestro primer enemigo es ese libro. El libro que los ha intoxicado. Por eso digo que el diálogo con el Islam es imposible y rechazo el cuento del Islam moderado, es decir el Islam que, de vez en cuando, se digna a condenar las matanzas, pero a la condena añade un pero. Por eso, la convivencia con el enemigo que tratamos como amigo es una quimera y la palabra «integración» es una mentira. Jurídicamente, de hecho, muchos son realmente nuestros conciudadanos. Gente nacida en Inglaterra, en Francia, en Italia, en España, en Alemania, en Holanda, en Polonia, etcétera. Individuos crecidos como ingleses, franceses, italianos, españoles, alemanes, holandeses, polacos… Que parecen realmente integrados en nuestra sociedad. Pero, al mismo tiempo, siguen tratando a sus mujeres (y también a las nuestras) como las tratan. Les pegan, las humillan y, a veces, las matan. Y cuando meten sus pies en la mezquita, se dejan de nuevo crecer la barba. Escuchan al iman que predica la yihad, estudian lo que es, aprenden de memoria el Corán y, ¡zas!, se convierten en aspirantes a terroristas y, después, en alumnos terroristas y después en militantes terroristas. Mientras los que no lo hacen, los llamados moderados, farfullan sus ambiguos "pero".



 Entrevistando al dictador argentino Galtieri

Tras el 7-J de Londres

Padre Andrzej, las estadísticas siempre me han resultado antipáticas -afirma Fallaci-. Sin embargo, no se pueden ignorar y, según la encuesta realizada tras las matanzas de Londres por el Daily Telegraph, resulta que el 24% de los musulmanes ingleses admite ’sentir simpatía por los sentimientos y los motivos que condujeron a la masacre del 7 de julio’. El 46% de los moderados comprende ‘por qué los terroristas se comportan de esa forma’. Y el 32% considera que ‘los musulmanes tienen que poner fin a la decadente civilización occidental’. El 14% confiesa ‘no sentir el deber de advertir a la policía si saben que se está preparando un atentado y, mucho menos, si un iman incita a la guerra santa». Por si no fuese suficiente, en un informe gubernamental, titulado The Next London Bombing, se deduce que en Gran Bretaña hay 16.000 musulmanes enrolados en actividades terroristas, y que la mitad de los jóvenes musulmanes entrevistados se dicen ‘ansiosos por pasar a la violencia para eliminar nuestra inmoral sociedad’.

Padre Andrzej, le fastidia oír ciertas cosas, ¿verdad? Le repugna ver en tantos huéspedes nuestros una nueva juventud hitleriana que aplica su Mein Kampf, ¿verdad? Y le parece excesivo que yo vea en ellos un peligro para Occidente y para el resto de la Humanidad, ¿verdad? Por eso le recuerdo que quienes instalaron el nazismo en Alemania y en Europa no fueron todos los alemanes. Fue la minoría de desalmados que miraba al profeta Hitler como los terroristas de hoy miran al profeta Mahoma.

Y si cree que es injusto echarle la culpa a una religión e, incluso, a un libro, piense en el chico americano que los marines capturaron con los talibán durante la Guerra de Afganistán. Americano, repito. Californiano. De Los Ángeles, con la piel blanca como la clara del huevo y de educación laico cristiana. No era marroquí ni tunecino o saudí o senegalés o somalí. Pero un día ese chaval americano puso el pie en una mezquita y dijo a sus padres: ‘Mummy, daddy, quiero estudiar el Corán’. Después, se fue a Pakistán, aprendió el Corán de memoria, se hizo lavar el cerebro por los imanes y terminó con los talibán en Kabul.

Padre Andrzej, ésta es mi respuesta a su última pregunta. Sé muy bien que, al dársela, refuerzo el riesgo de ir a la cárcel por delito de opinión enmascarado bajo la acusación de ‘vilipendio al Islam’. Sé bien que, junto a la cárcel, arriesgo la vida, es decir, desafío una vez más a la nueva Hitler-Jugend que quiere matarme. También sé que tampoco nosotros podemos presumir de santos. Que, en nuestra Historia, también nosotros hemos combinado las luces y las sombras. Pero hoy, el peligro no somos nosotros. Son ellos. Es su libro. Y dado que nadie lo dice, dado que alguien debe decirlo, lo digo yo.





©Andrzej Majewski

 viernes, 15 de septiembre de 2006


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Galtieri a Oriana Fallaci: “¿Cree que quiero suicidarme? ”


 




 










Nuestro extraño linaje /poema de Beatriz Iriart







 

La hiel se extiende
en la tierra madre
y en pagano rito
se establece
que el ARREPENTIMIENTO
continúe siendo
un interrogante
de los dioses.



                                                                                                                                                                                                                                                                                    
                                                                                              

  Fotografía: Giovanni Gilli








Si Tato Bores fue cómplice... ¡yo también! / viviana marcela iriart, City Bell, 8 de septiembre de 2011






Querido Tato: 
No te merecíamos ni te merecemos.  Desde la democracia te acusan de haber sido cómplice de la dictadura  y una mayoría abrumadora calla. Igual que en la dictadura.
Si vos fuiste cómplice, yo también.
Y que honor estar al lado tuyo.
Un beso y perdoná la humedad, es que cuando pasan cosas como éstas se te extraña más que nunca,

8 de septiembre de 2011




Tato, no saben lo que hacen / Alfredo Leuco


Muchas veces desde el gobierno nacional han demostrado desprecio por la trayectoria de figuras emblemáticas de la creatividad y la defensa de la democracia y los derechos humanos. La lista de estos tristes sucesos es larga. Pero hay dos que generaron mucho revuelo. La calificación, o mejor dicho la descalificación de Menchi Sábat, uno de los más prestigiosos dibujantes del mundo.

“Cuasimafioso”, le dijo la presidenta Cristina porque Menchi, en una caricatura, la había mostrado con dos tiritas cruzadas sobre su boca. Hasta soldados kirchneristas como Horacio Verbitsky se atrevieron a decir que eso no era correcto. Otra actitud terrible es el intento de reescribir la historia a gusto del consumidor. Este gobierno tuvo la osadía de colocarle otro prólogo al libro Nunca Mas que produjo la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas. No les gustaba el de Ernesto Sabato, repito, el de Ernesto Sabato no el de juan de los palotes y el actual secretario de derechos humanos escribió otro que dejó mas tranquilas las conciencias de aquellos que utilizaron el asesinato como instrumento político y que, por momentos, no solo no muestran arrepentimiento sino que exigen un homenaje y un monumento. Sabat, Sabato y ahora como si esto fuera poco intentaron ensuciar la memoria de Tato Bores.

Si señor, de Tato Bores. Se lo cuento en dos palabras. En uno de esos programas de televisión que pagamos todos los argentinos para que les chupen las medias al gobierno un par de muchachos ignorantes se atrevieron a cuestionar con liviandad la actuación de Tato Bores. Uno de ellos dijo “hizo programas políticos durante todas las dictaduras”. Es grave meterse con Tato y sobre todo desde la televisión para estatal. Pero de las palabras surgía con toda claridad la nula información y formación de sus protagonistas. Pero después, cuando se rebotó ese programa en otro de los que tiene el gobierno para hacer lo mismo sucedió algo mas grave porque el que metió la pata fue el propio ministro del Interior, Florencio Randazzo. Dijo que “me extraña que hombres que tenían una enorme responsabilidad y un enorme crédito…eh…deberían haber tenido otra actitud mucho mas combativa sobre lo que estaba ocurriendo en la Argentina.   No alcanza ni la ironía ni el chiste porque la historia fue trágica… si hubieran tenido otra actitud no hubiéramos tenido que lamentar 30 mil personas, lo digo con el miedo de estar cometiendo una injusticia.”..

También dijo Randazzo, nada menos que el ministro del Interior, el ministro político, el que venía de acusar a periodistas y a La Nación y Clarín de atacar la democracia, que no se sentía con autoridad para hacer una acusación y que el comentario lo hacía con mucho respeto. Siento la obligación de hacer yo también un par de comentarios, con mucho respeto. Y decirle al señor Ministro que estaba en lo cierto, que estaba cometiendo una injusticia. Y de paso le pregunto como para conocer más su pensamiento. Le reclama a Tato una actitud mucho mas combativa. OK… ¿Como quien? ¿Cómo sus jefes políticos, por ejemplo? Como Néstor y Cristina que durante la dictadura se dedicaron a construir una fortuna cobrando a deudores morosos asfixiados económicamente por una ley de la dictadura. A esos abogados que no presentaron un solo habeas corpus, aunque sea, por los presos y los desaparecidos. A usted, señor ministro, con todo respeto, ¿le hubiera gustado que Tato tuviese una actitud combativa como la de los Kirchner? Tato Bores padeció la censura de Isabel y Lopez Rega desde el mismo momento en que se murió Perón. Un grupo de tareas de civiles armados con ametralladoras irrumpió en su departamento a las 5 de la mañana. Lo encontraron en calzoncillos y finalmente se llevaron a Patricia, su sobrina, que vivía en el piso de arriba junto a sus padres, es decir el hermano de Tato. Patricia y su marido recién casados se comieron 8 años de cárcel bajo la dictadura.

La vida de Tato ya no fue la misma. Y cada vez que su trabajo le permitió estar cara a cara con alguno de los dictadores pidió por su libertad y por su vida. Esto no lo digo yo. Está en el libro de Carlos Ulanovsky y lo cuenta siempre Santiago Varela que fue uno de los más brillantes guionistas. Ni Carlos ni Santiago pueden ser acusados de antikirchneristas y mucho menos de colaboracionistas de la dictadura. Todo lo contrario, son gente de bien que siempre defendió la democracia y los derechos humanos. Hasta Sandra Russo que es la biógrafa oficial de la presidenta contradijo al ministro Randazzo.

Tato estuvo amenazado mil veces. Le pusieron una bomba en la casa cuando muchos de sus amigos ya habían marchado al exilio. Uno de sus hijos, Alejandro, tenía 16 años cuando tuvo que abrirle la puerta a aquellos fachos que se llevaron a su prima Patricia. Este domingo salió a defender a su padre de toda manipulación histórica porque Tato no puede defenderse, murió en 1996. Dentro de 12 días, Berta, la legendaria mujer de Tato Bores cumplirá 80 años. Esta columna es para ella. Un desagravio para un grande de la democracia, la libertad y la cultura como Tato. Y para Tato que está en el cielo, un solo pedido: perdónalos Tato, no saben lo que hacen.









Randazzo se mete con los muertos y no con algunos "vivos" /  Pablo Sirvén


No sólo Tato Bores avergüenza la argentinidad por haber hecho tan poco contra la dictadura, como denunció valientemente Florencio Randazzo. Lamentablemente hay muchos otros antiejemplos en la historia y en el mundo de personajes célebres que no fueron más l avergüenza la argentinidad por haber hecho tan poco contra la dictadura, como denunció valientemente Florencio Randazzo. Lamentablemente hay muchos otros antiejemplos en la historia y en el mundo de personajes célebres que no fueron más levantiscos con otras tiranías.

Oskar Schindler debería ser devuelto a la vida sólo para juzgarlo y pasarlo por las armas por haber ayudado nada más que a 1200 judíos polacos en su fábrica hasta quedar casi en la bancarrota. Mísera cifra comparada con el número de asesinados en la cámara de gas. No fue lo suficientemente combativo.

Pablo Picasso debió ser más intenso contra el bombardeo nazi y fascista a la población de Guernica, en vez de pintar ese rompecabezas naif de jardín de infantes, antes de mandarse a mudar de la España franquista para dibujar lienzos y servilletas y cortejar mujeres de cualquier latitud.

¿Acaso no es reprochable que Luis Buñuel volviese a la España del longevo dictador para filmar Viridiana y que accediera -nada menos- que a aceptar dócilmente los tijeretazos de la censura para que su película viese la luz?




Cuenta el crítico cinematográfico Homero Alsina Thevenet que como fue objetado el último tramo del film, donde el personaje central accedía a un triángulo sexual con un pariente y con la criada de la casa, "quedó sustituido por una partida de tute, con barajas españolas, entre los tres personajes. Después Buñuel se alegró de ese cambio forzado, que le permitía sugerir lo que no le dejaban mostrar". Hasta le hizo ganar al régimen una palma de oro, en el festival de Cannes. Habrase visto.

¡Y que tupé el de Joan Manuel Serrat!: irritar a sus hermanos catalanes al cantar en castellano, el único idioma autorizado por el Caudillo, que obligó a los coterráneos del trovador a callar su lengua regional durante tantas décadas mientras el autor de Mediterráneo se llenaba las alforjas de pesetas. Y no sólo eso. Se me eriza la piel de sólo pensar lo que hizo este traidor a las libertades republicanas cuando accedió a grabar "versiones modificadas" de "Muchacha típica" y de "Fiesta".

Soy muy conciente de que estoy produciendo mucho dolor con todos estos recuerdos, pero es necesario desenmascarar a quienes viviendo bajo una dictadura pretendían comer viviendo de sus trabajos sin arriesgar al máximo sus vidas. En este sentido, no hay peor sinvergüenza que Federico Fellini al que habrá que expulsar de todas las cinematecas del mundo por su más que espurio nacimiento profesional, ya que sus primeras obras fueron para una compañía del hijo de Benito Mussolini.

¿Para qué seguir? Enhorabuena, el ministro del Interior escupe el prestigio de Tato Bores porque no se atrevió a más con sus chistes contra el régimen militar. En Italia deberían imitarlo iniciando cruzadas con Fellini; en España, con Buñuel y en Alemania, con Schindler. Porque, como dice el dicho, más vale tarde que nunca.

Randazzo es tan valiente -y por sobre todo tan justo- que, en cualquier momento, la emprende también contra su compañero de gabinete, el canciller Héctor Timerman, que dirigía por entonces el diario ultraprocesista La Tarde. Y que está vivito y coleando

La Nación
7 de septiembre de 2011




Pelito para la vieja/ Alejandro Borensztein

La sopa de kneidalj que hace mi mamá es la mejor de todas. Eso dice todo hijo de madre judía. Los kneidalaj son una pelotitas que se amasan con harina de matza y se cocinan en un caldito de pollo, ideal para estos días de frío en los que uno se queda en casa abrigadito, disfrutando de la sopita, feliz y pipón, sobre todo ahora que el kirchnerismo arrasó en las internas y todos estamos mucho más tranquilos. 

Se sabía que si el kirchnerismo hacía una elección pobre se hubiesen puesto insoportables . Ya lo estaban antes del 14 de agosto de puro ansiosos que son, no quiero ni pensar lo que hubiera sido con un mal resultado. Por suerte no sólo ganaron sino que arrasaron. Supuestamente se terminó el problema, el gobierno seguirá su paso triunfal y todos disfrutaremos del modelo superador , chochos y en paz, o en armonía, o en amigable convivencia o… bah, dejémoslo en chochos, punto.

Sin embargo, los que ahora están imbancables son los contreras. Tanto los partidos opositores como los malditos periodistas que, como todos sabemos, son los verdaderos agentes de la sinarquía internacional, que enfrentan al campo popular y atentan contra los intereses nacionales, a través de esos perversos medios hegemónicos que se construyen con la ignorancia de la gente, que prefiere ver las aburridas ficciones y entretenimientos de Telefe o Canal 13, en lugar de ver Electroingeniespolsky TV que es divertidísimo. Fucking ignorants que también eligen consumir los diarios destituyentes, como bien los definieron el ministro Randazzo y otros demócratas. A la hora de votar, votan a la Jefa. Pero a la hora de comprar el diario, andan todos con el Olé debajo del brazo. Basuras.

Primero arrancaron denunciando que la Presidenta multiplicó su fortuna en estos años, como si eso tuviera algo de malo. Los Compañeros Jefes asumieron en el 2003 declarando un patrimonio de 7 palos y ahora resulta que ya tienen casi 80. ¿Qué quieren? ¿Un presidente que arranque con 80 y, de puro burro nomás, se vuelva a su casa, después de 8 años, con 7 palitos miserables? ¿Prefieren un loser en la Rosada? Los buenos gobernantes saben ganar guita. Miren los Rodríguez Saá. Deben tener una fortuna (habría que ver en cuanto está valuada la provincia de San Luis). 

Algunos contreras sostienen que los funcionarios públicos no deberían hacer negocios mientras están en funciones. ¿Cómo quieren que hagan los pobres tipos? La presidenta gana alrededor de 20.000 pesos por mes. A eso hay que restarle las retenciones, que con este gobierno insaciable que no quiere volver a subir el mínimo no imponible, no le deben quedar más de 15.000 mangos. Para un obrero esto puede parecer una fortuna, pero para un presidente no es nada. Sólo la nafta del helicóptero que usa para ir y venir de Olivos, sin pisar territorio de Macri para no contaminarse el progresismo, debe costar esa guita por mes. Encima, como no puede decir que hay inflación porque Moreno la multa, no puede pedir aumento. Una guachada. Posiblemente si le pidiera ayuda a Moyano, un 25% le consigue. Sería el titular del año en todos los diarios destituyentes: “Ahora dicen que Moyano reclamaría un aumento salarial presidencial acorde a la inflación del supermercado”.

Agotado el asunto de las declaraciones patrimoniales, los medios insisten con publicar las irregularidades denunciadas por los jueces electorales y cierta falta de calidad institucional. Exigen una oposición seria y reclaman alternancia en el gobierno. ¡Si quieren alternancia ganen las elecciones, viejo! Si no, vamos a tener que seguir reformando las constituciones provinciales todas las veces que sean necesarias para permitir nuevas re-reelecciones como hicieron Gioja en San Juan que sacó más del 60%, o Alperovich en Tucumán que sacó más del 70%. No jodamos más con el verso de la alternancia democrática. Se vota lo que hay y al que no le gusta que se vaya a vivir a Canadá , y si no que se la banquen como hicieron los paraguayos con Stroessner. Y si nos apuran demasiado les vamos a reformar la Constitución Nacional también. Ya van a ver lo que es bueno. A esta altura, y con el 50% de los votos, no hay más nada que discutir. A llorar a la Iglesia y pelito para la vieja

Uno los defiende todo lo que puede, por eso esta semana fui a lo de mi vieja para que se quede tranquila, no se altere por las cosas que hacen los opositores, y de paso controlar cuantas kneidalaj hizo. Se acercan las fiestas judías, somos muchos y hay mucha pelotita que amasar. Pero estaba chiva. Fanática kirchnerista, no se pierde una sola aparición de la Jefa o de cualquiera de sus ministros.

Justo esta semana, el ministro Randazzo apareció por televisión mientras mostraban imágenes de programas de mi viejo Tato durante el Proceso, satirizando a los militares de una forma que, al verlo hoy, me asusta. Había estado prohibido durante 1974 y 1975 por la banda fascista de Isabel y López Rega y luego siguió prohibido por la de Videla y Massera durante 1976, 77 y 78. En el 79 volvió, toreando al Proceso, bomba en casa mediante, con sus únicas armas: el humor y la sátira. Defendiendo valores democráticos, de la manera más sutil posible.

Caminaba por la cornisa, pero obviamente nunca se arrojó al vacío. Luego de ver las imágenes el ministro Randazzo dijo textualmente: “Yo no voy a hacer una acusación sobre Tato Bores, no me siento con la autoridad para hacerlo, pero viendo lo que ocurrió después… me extraña que hombres que tenían una enorme responsabilidad y un enorme crédito… eh… deberían haber tenido otra actitud , absolutamente otra actitud, lo digo con mucho respeto, una actitud mucho más combativa sobre lo que estaba ocurriendo en la Argentina. No alcanza ni la ironía ni el chiste porque la historia fue trágica… si hubieran tenido otra actitud no hubiéramos tenido que lamentar 30.000 personas, lo digo con el miedo de estar cometiendo una injusticia”.

¿Qué imagina el ministro Randazzo que debió haber hecho mi viejo? ¿Ahorcar represores con los tiradores del frac? ¿Asfixiarlos metiéndoles la peluca en la boca? Como él ya no está para defenderse de toda manipulación histórica, no me queda más remedio que hacerlo en su nombre.

Mi mamá ya había amasado una suficiente cantidad de kneidalaj. Desparramó todas las pelotitas en el piso del living y las puso una al lado de otra, formando letras y dejando escrito un mensaje: “Con Tato no”.


Arquitecto y productor de tv
Clarin
03/09/11


















Cuando Joan Baez denunció al gobierno comunista de Vietnam/ Karen G. Jackovich, 1979, People Magazine


 Joan Baez, Hanoi, navidades 1972


Todos sus sufrimientos aún no ha terminado: Joan Baez tiene un nuevo 
y crítico punto de vista sobre  Vietnam  y es recibida con frialdad



En los años 60, Joan Baez hizo de la canción We Shall Overcome el himno de la unificación de la lucha por los derechos civiles y los movimientos contra la guerra de Vietnam. Pero si se le pregunta cuál es la canción que representa hoy su punto de vista sobre Vietnam , ella dice que podría ser Both Sides Now.





La suma sacerdotisa de la protesta social, que una vez viajó a Hanoi para llevar  su mensaje antibélico directamente a los prisioneros de guerra estadounidenses (American POWs – American Prisioners of War) que estaban allí, ahora denuncia al gobierno comunista de Vietnam por el "brutal desprecio a los derechos humanos" de sus ciudadanos. En una solicitada que ocupó toda una página, llamada   "Carta abierta a la República Socialista de Vietnam", publicada  en los cinco principales diarios de EE.UU  el mes pasado, Baez llamó a poner fin a lo que ella describe como "el encarcelamiento y la tortura" de unos 150.000 vietnamitas "presos de conciencia. Es trágicamente  irónico ", escribió, "que la crueldad, la violencia y la opresión practicada por las potencias extranjeras en su país por más de un siglo continúan hoy en día bajo el actual régimen. "


En el aeropuerto rumbo a la guerra


La información de Báez sobre la represión política se basa por un lado en relatos de primera mano de refugiados vietnamitas que habían sido encarcelados en "campos de reeducación" y por el otro, en una investigación privada realizada  bajo los auspicios del International Human Rights Committee  (Comité Internacional de los Derechos Humanos), que Báez fundó la pasada  primavera. El objetivo del grupo es presionar a los gobernantes de Vietnam para que permitan la visita  de un equipo neutral de investigadores para que vean las cárceles y los centros de reeducación. "Hemos escuchado que el maltrato a los prisioneros ha alcanzado un nivel bastante grave”, dice ella, "incluida la tortura, el hambre, la asfixia con bolsas y el uso de prisioneros para limpiar campos de minas en cuatro patas."
   
Sin embargo, Báez no ha tenido mucho éxito tratando de reclutar celebridades para su causa.  Legandarios pacifistas antibélicos  como Allen Ginsberg, Daniel Berrigan y Staughton Lynd han firmado la solicitada, pero menos de un tercio de los 350 miembros de la  llamada "comunidad de la paz " respondieron a su llamado.  Hay notables ausencias que  destacar: Tom Hayden (él dijo que nunca vio la carta), su esposa Jane Fonda  ( nunca respondió dos largas cartas que se le enviaron) y Daniel Ellsberg ("Él sólo quería hablar de mi futuro movimiento antinuclear ", dice Joan). Otra ausencia destacada es la del abogado izquierdista William Kunstler, que ladraba: "Yo no creo en los ataques públicos contra los países socialistas".


 Conferencia de prensa


"La gente no está exactamente deseosa de sumarse a la causa esta vez”, admite Báez. "Algunos sintieron que no tenían derecho a hablar en contra de Vietnam. Otros simplemente no querían pensar en ello. Pero yo estoy dispuesta a arriesgar mi reputación con la “comunidad de la  paz” porque soy una amiga del pueblo vietnamita. Creo que estoy siendo fiel a la misma gente a la que le fui fiel durante todos los años de lucha en los años ´60”.







Baez, de 38 años, dice que el cambio de su punto de vista sobre   Vietnam es más aparente que real. "Mi política ha sido la no violencia desde que tengo 14 años", dice. "Eso significa que mi preocupación han sido siempre para las personas que son víctimas, aquellas que no pueden hablar por sí mismas y que necesitan ayuda externa. Yo nunca fui pro-Viet Cong." En cuanto a las acusaciones de que ella está siendo "utilizada" por la derecha, dice: "Yo he sido usada políticamente durante toda mi vida por cualquiera que creyera conveniente usarme”.




Joan adolescente protestando contra la guerra


 Joan Baez y su madre, Joan Bridge, arrestadas. Fueron 
condenadas a 45 días de prisión.


En su vida privada, las prioridades Báez siguen siendo sacar un  álbum al año y la educación de su  hijo Gabriel, 9,  con su ex esposo David Harris (se divorciaron en 1972). Ella y Gabriel ocupan una pequeña casa en los suburbios de Stanford, California, cerca de Oakland. Un nuevo LP, Honest Lullaby, saldrá a  finales de este mes, y una gira por 20 ciudades este verano ayudará a financiar el trabajo del comité y el  pago de los 54.000 dólares que salió  su solicitada "Carta Abierta". Ella dice que a pesar de las exigencias de su carrera y de la política, "He tratado de dar una educación lo más normal posible a Gabriel". Ella parece haber tenido éxito. "Si él no está jugando a los tiros en el fondo de la casa”, dice Báez ",  dibuja o construye cosas con su Lego. Gracias a Dios", suspira mamá , "por los juguetes Lego y por la televisión."


June 18, 1979, Vol. 11, No. 24



Jane Fonda le responde a Joan Baez




“Yo le escribí una carta bastante larga (a Jane Fonda), cuidadosamente redactada, en la que le explicaba lo importante que su apoyo era para nosotros. Jane y yo nos conocíamos sólo de algún que otro breve encuentro. Nunca habíamos trabajado juntas. Yo le escribí porque era una actriz a la que admiraba mucho y una persona que compartía mi actitud de protesta contra la guerra de Vietnam. Me contestó con una carta dirigida a mí, con copia a veinticinco de nuestros firmantes. Era una carta muy amable, pero rehusaba la invitación.

“Sin duda existe cierta represión en Vietnam y reconozco que tal vez yo no sepa ver los hechos que usted denuncia. Sin embargo, he tratado de reflexionar y considerar el asunto con ecuanimidad y no estoy convencida de que sus acusaciones sean ciertas”.

Luego decía que mis fuentes de información eran cuestionables y que la represión no era tan fuerte como el baño de sangre que se temía. Luego (…) cometió el sorprendente desliz de poner:

“No sé si podemos esperar que, de la noche a la mañana, los vietnamitas pongan en libertad a todas esos millones de personas…”.

Nuestros cálculos eran mucho más modestos (150.000 personas). Ella esperaba que yo reconsiderara mis denuncias, ya que me alineaba con los elementos más reaccionarios y negativos de nuestros país, que siguen alegando  que es mejor la muerte que el comunismo.

“Si bien no estoy de acuerdo con su punto de vista y me preocupan los efectos de lo que está haciendo, espero poder entablar un diálogo con usted. Su iconoclastia me intriga y me gustaría que pudiéramos comprendernos mejor”. 

(…) Por lo menos, Jane no era hipócrita. 

Joan Baez, 
“Y una voz para cantar”
Ed. Seix Barra, 1988





La vida tiene dos caras

Ondas y remolinos en el cabello de un ángel,
castillos de helado en el aire,
esponjosas colinas flotando a mi alrededor,
eso eran para mí las nubes.

Pero ahora lo que veo es que tapan el sol,
dejando lluvia y nieve por todas partes,
habría podido hacer tantas cosas
pero se interpusieron en mi camino.

Ahora me doy cuenta de que las nubes tienen dos caras,
y puedo ver ambas, pero aún así
lo que me viene a la mente siguen siendo aquellas fantasías
la verdad es que no sé qué son las nubes


La luna en Junio desde lo alto de una noria,
sentirse como flotando en el aire,
un cuento de hadas hecho realidad,
eso era para mí el amor.

Pero ahora es simplemente como una actuación
en la que te alejas sonriendo cuando se acaba
y aunque te duela, no lo muestras,
ni delatas lo que sientes.

Ahora me doy cuenta de que el amor tiene dos caras,
a veces das y a veces recibes, pero aún así
lo que me viene a la mente siguen siendo aquellas fantasías
a verdad es que no sé qué es el amor

Lágrimas, miedos, momentos de los que te sientes orgullosa,
decir “te quiero” bien fuerte,
sueños, esquemas y el abrigo de la gente,
eso era para mí la vida.

Pero ahora mis viejas amigas actúan de forma extraña,
me hacen gestos de reproche, y dicen que he cambiado,
parece que unas cosas se pierden y otras se ganan
en el juego de vivir.

Ahora me doy cuenta de que la vida tiene dos caras,
a veces ganas y a veces pierdes, pero aún así
lo que me viene a la mente siguen siendo aquellas fantasías
la verdad es que no sé qué es la vida

Fuente: Taringa





Both Sides Now
Bows and flows of angel hair
And ice cream castles in the air
And feather canyons everywhere
I've looked at clouds that way

But now they only block the sun
They rain and snow on everyone
So many things I would have done
But clouds got in my way

I've looked at clouds from both sides now
From up and down, and still somehow
It's cloud illusions I recall
I really don't know clouds at all

Moons and Junes and Ferris wheels
The dizzy dancing way you feel
As every fairy tale comes real
I've looked at love that way

But now it's just another show
You leave 'em laughing when you go
And if you care, don't let them know
Don't give yourself away

I've looked at love from both sides now
From give and take, and still somehow
It's love's illusions I recall
I really don't know love at all

Tears and fears and feeling proud
To say 'I love you' right out loud
Dreams and schemes and circus crowds
I've looked at life that way

Oh but now old friends are acting strange
They shake their heads, they say I've changed
Well something's lost but something's gained
In living every day

I've looked at life from both sides now
From WIN and LOSE and still somehow
It's life's illusions I recall
I really don't know life at all

I've looked at life from both sides now
From up and down and still somehow
It's life's illusions I recall
I really don't know life at all

Letra y música Joni Mitchell


All Her Trials Aren't Over Yet: Joan Baez Takes a New, Dark View 
of Vietnam and Gets the Cold Shoulder/Karen G. Jackovich




In the '60s Joan Baez made We Shall Overcome the unifying anthem of the civil rights and antiwar movements. But if called upon to find a theme song for her view of Vietnam today, she might well consider Both Sides Now. 

The high priestess of social protest, who once took her antiwar case directly to American POWs in Hanoi, now charges the Communist government in Vietnam with "brutal disregard of [the] human rights" of its citizens. In a full-page "Open Letter to the Socialist Republic of Vietnam," published in five major U.S. newspapers last month, Baez called for an end to what she describes as "the imprisonment and torture" of some 150,000 Vietnamese "prisoners of conscience. With tragic irony," she wrote, "the cruelty, violence and oppression practiced by foreign powers in your country for more than a century continue today under the present regime." 

Baez's information about political repression is based in part on firsthand accounts from Vietnamese refugees who had been imprisoned in "reeducation camps"—and on a private investigation under the auspices of the International Human Rights Committee, which Baez founded this spring. The group's goal is to pressure Vietnam's rulers into allowing a neutral team of investigators to visit its prisons and centers. "We've heard that prisoner treatment has reached a fairly gross scale," she says, "including torture, starvation, suffocation in cargo boxes and using prisoners to clear mine fields on all fours." 




But Baez has not had total success enlisting help from the U.S. celebrity cause circuit. Such staunch anti-warriors as Allen Ginsberg, Daniel Berrigan and Staughton Lynd cosigned her newspaper manifesto, but less than a third of the 350 members of the so-called "peace community" responded to her pitch letter. Notably missing from action: Tom Hayden (he said he never saw the letter), his wife, Jane Fonda (she never responded after two lengthy letters), and Daniel Ellsberg ("He only wanted to talk about my future in the antinuclear movement," says Joan). Then there was radical lawyer William Kunstler, who barked: "I do not believe in public attacks on socialist countries." 


"People were not exactly eager to donate to this," Baez admits. "Some felt they didn't have a right to speak out against Vietnam. Others just didn't want to think about it. But I am willing to risk my reputation with the American peace community because I am a friend of the Vietnamese people. I think I am being true to the same people I was being true to all those years in the '60s." 

Baez, 38, says her turnabout on Vietnam is more apparent than real. "My politics have been nonviolence since I was 14," she says. "That means that my concern has always been for the people who are victimized, unable to speak for themselves and who need outside help. I was never pro-Viet Cong." As for accusations that she is being "used" by the right wing, she says: "I've been used politically all my life by whoever sees fit to use me." 



 


On the domestic front, Baez's priorities remain her album-a-year singing career and bringing up son Gabriel, 9, by ex-husband David Harris (they divorced in 1972). She and Gabriel occupy a small home in suburban Stanford, Calif., near Oakland. A new LP, Honest Lullaby, is due later this month, and a 20-city tour this summer will help finance the committee's work and the $54,000 spent to publish her "Open Letter." Despite the demands of her career and politics, she says, "I've tried to give Gabriel a quasi-normal upbringing." She seems to have succeeded. "If he isn't playing shoot-'em-up out back," Baez reports, "he draws or builds things with those Lego sets. Thank the Lord," sighs Mom, "for Lego toys and television." 
June 18, 1979, Vol. 11, No. 24




   
 

16 October

1967: Joan Baez arrested in Vietnam protest


Rallies across America have taken place in 30 US cities, from Boston to Atlanta, to protest against the continuing war in Vietnam. 

In Oakland, California, at least 40 anti-war protesters, including the folk singer Joan Baez, were arrested for taking part in a sit-in at a military induction centre. 

As many as 250 demonstrators had gathered to try and prevent conscripts from entering the building when the arrests were made. 

The 'Stop the Draft Week' protests are forming part of a nationwide initiative organised by a group calling itself 'the Resistance'. 

Accompanied by singing from Ms Baez and others, the sitting protesters forced draftees to climb over them in order to get inside the building. 

As they entered they were handed leaflets asking them to change their minds, refuse induction and join the protests. 

Human barricade
Police formed a human barricade to enable inductees to pass and then made their arrests. 

In New York, around 500 demonstrators marched to protest against the draft. Young men placed draft cards into boxes marked 'Resisters'. 

181 draft cards and several hundred protest cards were presented to a US Marshal but he refused to accept them. 

The group then marched to a post office and posted them directly to the Attorney General in Washington. 

The anti-war movement took on an added gravity yesterday when Florence Beaumont, mother of two, burned herself to death. 

After soaking herself in petrol she set herself alight in front of the Federal Building, Los Angeles.

Counter-demonstrations have been planned by the National Committee for Responsible Patriotism, based in New York. 

Parades have been scheduled for the weekend in support of "our boys in Vietnam".


In Context
Joan Baez was a determined war protester as well as a successful singer. She was jailed several times for her political activism during the Vietnam years. On this occasion she got 10 days. 

From 1948 until 1973 American men were drafted to fill vacancies in the armed forces which could not be filled through voluntary means. 

University students could be exempt though this tended to favour young men from more privileged, high income families. 

Others who did not wish to fight could apply for the status of 'Conscientious Objector' on moral or religious grounds. 

Many who could not obtain exemption and refused to sign up received prison terms. 

In 1973, the draft ended and the US converted to an 'All-Volunteer military'.