"Absolutamente emocionante, pero de veras (...) no esperaba que fuera tan emocionante, tan conmovedora para mí y tengo la impresión de que para el público también, porque me di cuenta de que todo el mundo quedó en suspenso desde la primera palabra hasta la última. No se oyó volar una mosca, no se oía respirar. Es emocionante realmente”.
Gabriel García Márquez
Premio Nobel de Literatura
Declaraciones dadas la noche del estreno en México, agosto 1989
Gabriel García Márquez
Premio Nobel de Literatura
Declaraciones dadas la noche del estreno en México, agosto 1989
"Fragmentar la realidad, descodificar una unidad que es falsa y se basa en la rutina de repetir que existe, que es sólo lo que vemos. Volver sobre el tiempo y reiterar que nos aferramos a él para hacer lógica la existencia.
Necesitamos del pasado para darle sentido al presente. Caso contrario, caemos en el vacío y los fantasmas que nos habitan salen a la calle, se instalan en nuestras casas, comen y beben de nosotros. Tomar un trozo de la realidad: el instante en que la mujer del coronel sale a patio, remienda y hace el milagro de las prendas nuevas, y no ve caer la tarde, ni escucha el pito de la cigarra. Congelar ese instante, hacerlo eterno en la memoria. Suspender el color y los sonidos, luchar contra la dictadura del tiempo que pasa sin hacer ruido.
El Coronel no tiene quien le escriba es el drama del hombre común de América Latina. La esperanza fallida, la ilusión rota en promesas no cumplidas, en asaltos a la honestidad y en pactos de muerte. Una mujer y un hombre unidos por el fracaso. El hijo muerto, la casa hipotecada, la pensión que no llega; la dignidad, como coraza, para negar el horror de que ya no hay futuro.
Poder, espacio y tiempo, temas que son una constante en la trayectoria de Rajatabla. Acercarse al texto de El Coronel es introducirse en el drama de la sociedad latinoamericana. Y hemos querido hacerlo con rigor, sin concesiones a los arquetipos revolucionarios de una fiebre perdida.
Nunca más vigente que ahora, este canto a la desesperanza, este presagio que, partiendo del escenario, nos habla de uno y de todos. Desde la casa del coronel, vemos abrirse los muros, extenderse las ciénaga, ganar la lluvia, saquear los muebles y objetos, crecer el vacío, imponerse la soledad como destino. Superposición de tiempos y modificación de espacios regulan esta puesta en escena que intenta aproximarse a la tragedia. Tragedia de un hombre y unos pueblos sometidos a la expoliación de su riqueza y a la traición de la esperanza".
Carlos Giménez, texto del programa de mano, 1989.
El actor Ángel Fernández Mateu realizó el papel de El Coronel
a partir de 1992, debido a la enfermedad y posterior fallecimiento
de José Tejera
Fuente:
Ana Lía Cassina / Carmen Gallardo / Carlos Cassina /Viviana Marcela Iriart/